El final de «Medida de Venganza» deja a los espectadores cuestionando la cordura de Lillian y la moralidad de sus acciones. Ella venga la muerte de su hijo, pero a un gran costo personal.
«Medida de Venganza» es un thriller psicológico que mezcla teatro y drama de la vida real. La película sigue a Lillian Cooper, una actriz de teatro, mientras busca justicia por la misteriosa muerte de su hijo. Su viaje está lleno de alucinaciones y citas de Shakespeare, lo que la convierte en una experiencia única pero confusa.
La Búsqueda de Justicia de Lillian
Lillian Cooper, una actriz de Broadway, se entera de la muerte de su hijo Curtis justo después de su última actuación en el escenario. Curtis, un músico, es encontrado muerto, y las autoridades rápidamente lo califican como una sobredosis accidental. Lillian, sin embargo, sospecha que hubo juego sucio. Decide investigar por su cuenta, formando equipo con Taz, el traficante de drogas de Curtis. Juntos, se sumergen en el peligroso submundo para descubrir la verdad.
A medida que Lillian profundiza en la investigación, comienza a alucinar con personajes de las obras que ha interpretado, como Hamlet y Lady Macbeth. Estas alucinaciones actúan como su voz interior, empujándola hacia la venganza. La película mezcla hábilmente escenas de Lillian en el escenario con su búsqueda en la vida real, creando una experiencia surrealista.
El viaje de Lillian está marcado por su creciente locura. Equilibra sus actuaciones en el escenario con su venganza fuera de él, lo que lleva a una serie de confrontaciones violentas. Apunta al exmánager de Curtis, al jefe de su antigua compañía discográfica y a un compañero músico. Cada confrontación es teatral, con Lillian citando líneas de Shakespeare mientras comete los asesinatos.
El Final Surrealista
El clímax de la película es intenso y surrealista. Lillian se aleja de Broadway, rodeada de alucinaciones de personajes de Shakespeare como Romeo, Julieta, Desdémona, Cleopatra y el Rey Lear. Este final deja a los espectadores con una sensación de ambigüedad. Lillian logra su objetivo de vengar la muerte de su hijo, pero sus acciones plantean preguntas sobre su cordura y la moralidad de su búsqueda.
La película no proporciona respuestas claras. En su lugar, deja que la audiencia interprete el viaje de Lillian y sus implicaciones. Esta conclusión abierta puede ser frustrante para algunos espectadores, pero añade profundidad a la narrativa.
Recepción Crítica
«Medida de Venganza» recibió en su mayoría críticas negativas. Los críticos señalaron el guion incoherente, la mala cinematografía y la falta de profundidad en los personajes. La trama fue descrita como desarticulada, con cambios de tono abruptos y secuencias mal escenificadas. La muerte de Curtis, el evento que pone en marcha la trama, fue vista como abrupta y despreocupada, dejando poco espacio para la exploración emocional o el desarrollo de los personajes.
La actuación de Melissa Leo como Lillian fue uno de los pocos aspectos que recibió elogios. Los críticos reconocieron su dedicación al papel y su capacidad para recitar líneas de Shakespeare con convicción. Sin embargo, ni siquiera su actuación pudo salvar la película de sus numerosos defectos. El contraste entre el talento de Leo y la producción amateur de la película fue visto como una distracción constante.
Análisis del Final
El final de «Medida de Venganza» resalta los problemas generales de la película. El intento de mezclar un thriller psicológico con un drama shakesperiano resulta en una trama confusa. Las alucinaciones de personajes de Shakespeare, aunque intrigantes, no están bien integradas en la trama, lo que lleva a una falta de coherencia.
La exploración de temas como el duelo, la venganza y la locura es superficial. El arco del personaje de Lillian, que debería haber sido una representación convincente del descenso de una madre a la locura, se ve socavado por el ritmo apresurado de la película y la falta de profundidad emocional. La decisión de que Lillian cometa asesinatos durante sus actuaciones en el escenario añade una capa de absurdidad que resta seriedad a la película.
Aspectos técnicos como la cinematografía y la mezcla de sonido también fueron criticados. Las escenas estaban mal iluminadas y bañadas en un enfoque suave, lo que dificultaba que los espectadores se involucraran con la historia. La mezcla de sonido estaba desequilibrada, con conversaciones de fondo que a menudo sobrepasaban el diálogo principal.
Conclusión
«Medida de Venganza» no logra cumplir con su premisa intrigante. El final, aunque dramático, se queda corto debido a las numerosas deficiencias de la película. La falta de coherencia narrativa, profundidad de los personajes y competencia técnica resulta en una experiencia de visualización desconcertante.
A pesar de la encomiable actuación de Melissa Leo, «Medida de Venganza» lucha por encontrar su camino. El final, al igual que el resto de la película, está marcado por el potencial perdido y la promesa incumplida. Para aquellos que buscan un thriller psicológico convincente, «Medida de Venganza» es poco probable que satisfaga.